Hablando de meditar y de prácticas que debemos seguir para nuestro crecimiento y despertar espiritual, está la de meditar de manera Atenta o Consciente, para estar más alertas de lo que pasa durante este tipo de prácticas y el contacto que podemos tener con nuestro ser interior!
Con el alma... Luz, In láak'ech!!! ૐ
1- Empieza por sentarte cómodamente en un lugar donde no te molesten o interrumpan.
2- Cierra los ojos.
3- Respira normal y naturalmente; poco a poco permite que tu consciencia se concentre en la respiración. Simplemente observa la respiración, tratando de no alterarla ni controlarla en ninguna forma consciente.
4- Mientras observas tu respiración, tal vez notes que ésta cambia espontáneamente. Puede variar en velocidad, ritmo o profundidad, e incluso puede haber momentos en los que tu respiración parece detenerse un rato. Al margen de lo que suceda con tu respiración, obsérvala en forma inocente, sin tratar de provocar ni iniciar ningún cambio.
5- Descubrirás que a veces tu atención se desvía de la respiración y estás pensando en otras cosas o prestando atención a los ruidos que llegan de afuera. Siempre que notes que no observas tu respiración, vuelve lentamente a concentrar tu atención en ella.
6- Si durante la meditación notas que te concentras en algún sentimiento, estado de ánimo o expectativa, trátalo como lo harías con cualquier otro pensamiento y lentamente vuelve tu atención a la respiración.
7- Practica esta meditación durante quince minutos.
8- Al cabo de esos quince minutos, mantén los ojos cerrados y permanece en la quietud otros dos o tres minutos. Sal de la meditación en forma gradual antes de abrir los ojos y volver a la actividad.
Se recomienda la práctica de esta meditación dos veces al día, a la mañana y a la noche. También durante el día si algo te molesta o te agita, te ayuda a calmarte y a concentrarte. Durante la meditación tendrás alguna de estas tres experiencias. Cualquiera de ellas es correcta:
- Tal ve te aburras o inquietes y tu mente puede llenarse de pensamientos, señal de que tensiones y emociones de raíces profundas están liberándose de tu organismo. Mediante una práctica continua y sin esfuerzo de la meditación facilitarás la eliminación de todas estas impurezas de tu mente y tu cuerpo.
- Tal vez te duermas en medio de la meditación. Si así sucede, es señal de que necesitas más descanso en otros momentos del día.
- Tal vez entres suavemente en la "brecha". Cuando el mantra o respiración se torna más estable y refinada entras en la brecha existente entre tus pensamientos, más allá del sonido, más allá de la respiración.
Esta enseñanza sobre la Meditación Atenta, sus propósitos y consecuencias fue extraída del libro "Viaje Hacia el Bienestar", del Dr. Deepak Chopra.